Meg Ryan: Icono de la comedia romántica en el cine de los 90

Meg Ryan es una de las grandes estrellas de las comedias románticas de los años 90. Conocida por su papel en Cuando Harry conoció a Sally, Ryan se convirtió en un referente del género con películas como Tienes un e-mail y La princesa prometida. A lo largo de su carrera, ha demostrado una gran química en pantalla con otros grandes actores, como Tom Hanks. Además de su éxito en el cine romántico, Meg Ryan ha continuado explorando nuevos géneros, manteniéndose vigente en la industria durante más de tres décadas.

Meg Ryan (Actriz)

Tabla de contenidos

Biografía

Primeros años y carrera en la televisión

Margaret Mary Emily Anne Hyra, conocida artísticamente como Meg Ryan, nació el 19 de noviembre de 1961 en Fairfield, Connecticut, en el seno de una familia de clase media. Su madre, Susan, era una enfermera, y su padre, Harry, era un científico. Ryan creció con una educación bastante tradicional, pero desde joven mostró interés por la actuación. Tras graduarse de la escuela secundaria, Ryan asistió a la Universidad de Nueva York (NYU), donde estudió periodismo, pero pronto descubrió que su verdadera pasión era la interpretación.

Su carrera comenzó en la televisión, donde consiguió papeles en series como As the World Turns (1982-1984). Fue en este drama matutino donde Ryan hizo su primera aparición en una producción importante, interpretando a Betsy Stewart. Aunque su participación en la telenovela fue breve, le permitió ganar visibilidad en el mundo de la televisión y la actuación, lo que la catapultó a Hollywood. A finales de los 80, Ryan dejó la televisión y comenzó a centrar sus esfuerzos en el cine.

El gran salto a Hollywood: Cuando Harry conoció a Sally y las comedias románticas

Meg Ryan alcanzó la fama internacional gracias a su papel en la comedia romántica Cuando Harry conoció a Sally (1989), dirigida por Rob Reiner y escrita por Nora Ephron. En esta película, Ryan interpretó a Sally Albright, una mujer independiente y fuerte que, a lo largo de la película, desarrolla una relación con Harry Burns, interpretado por Billy Crystal. La química entre Ryan y Crystal fue una de las claves del éxito de la película, que se ha convertido en un clásico del cine romántico.

La película no solo fue un éxito de taquilla, sino que también cimentó el lugar de Meg Ryan como la «chica de la comedia romántica» en Hollywood. Su interpretación de Sally, una mujer encantadora pero algo neurotípica, mostró la habilidad de Ryan para interpretar personajes complejos con un toque de dulzura y vulnerabilidad, lo que la hizo aún más atractiva para el público.

El auge en las décadas de 1990 y 2000: Más comedias románticas y nuevos horizontes

Después de Cuando Harry conoció a Sally, Ryan se convirtió en la principal protagonista de una serie de comedias románticas que definieron su carrera en los años 90. A partir de ahí, protagonizó una serie de éxitos comerciales que consolidaron su estatus como la estrella del género. Entre sus películas más destacadas en esta época se encuentran ¡Se dice de mí (1991), Tienes un e-mail (1998) y Bajo el sol de la Toscana (2003).

En ¡Se dice de mí (1991), Ryan interpretó a una mujer que comienza a sospechar que su esposo podría estar teniendo una aventura. La película fue un éxito en la taquilla y ayudó a consolidar a Ryan como una figura prominente en Hollywood. Un año después, se unió a Tom Hanks para protagonizar Joe contra el volcán (1990), una película dirigida por John Patrick Shanley, que aunque no fue un éxito en taquilla, se ganó un lugar de culto y ayudó a cimentar su química con Hanks, que se convertiría en un compañero de pantalla recurrente en su carrera.

Sin embargo, fue Tienes un e-mail (1998), dirigida por Nora Ephron, la película que marcó la culminación de su estatus como reina de las comedias románticas. En esta película, Ryan interpretó a Kathleen Kelly, una mujer que se enamora por correo electrónico sin saber que está manteniendo una relación virtual con un hombre que es su competidor comercial en la vida real. La película fue un éxito masivo y se convirtió en un referente del género. La conexión emocional entre Ryan y Tom Hanks en la película se consolidó como una de las mejores parejas de la historia del cine romántico.

La transición a papeles más dramáticos y la evolución de su carrera

A medida que avanzaba su carrera, Meg Ryan comenzó a alejarse del estereotipo de la «chica de las comedias románticas» y asumió papeles más dramáticos y complejos. Aunque sus películas románticas continuaban siendo populares, Ryan no dudó en probar suerte en proyectos más serios. En 2003, protagonizó In the Cut, un thriller psicológico dirigido por Jane Campion, en el que interpretaba a una profesora de literatura que se ve envuelta en un misterio de asesinato. Aunque la película fue divisiva, Ryan recibió elogios por su valentía al asumir un papel tan diferente a los que había interpretado previamente.

Otro proyecto significativo de esta etapa fue The Women (2008), una comedia de alto perfil en la que Ryan interpretó a una mujer que, tras descubrir que su esposo la engaña, debe reinventarse y redescubrir quién es. A lo largo de su carrera, Ryan se mostró decidida a evitar ser encasillada y a explorar personajes más complejos, lo que le permitió demostrar su capacidad para interpretar una variedad de roles.

El regreso a la dirección y su vida personal

Aparte de su carrera como actriz, Meg Ryan también incursionó en la dirección. En 2015, debutó como directora con la película Ithaca, un drama basado en la novela de William Saroyan The Human Comedy. En este proyecto, Ryan también actuó, interpretando a la madre de un joven que se ve obligado a crecer rápidamente mientras lidia con la Segunda Guerra Mundial. Ithaca recibió críticas mixtas, pero el proyecto representó un paso importante en la carrera de Ryan, que se aventuró en un nuevo rol en la industria del cine.

En cuanto a su vida personal, Meg Ryan ha sido una figura muy mediática a lo largo de los años, con varias relaciones que han captado la atención del público. Estuvo casada con el actor Dennis Quaid, con quien tiene un hijo, Jack, nacido en 1992. Tras su divorcio en 2001, Ryan fue muy reservada sobre su vida amorosa, pero en los últimos años ha sido vista en varias ocasiones con el músico John Mellencamp. A lo largo de su vida, ha mantenido una reputación de ser una persona tranquila y alejada de la presión mediática, aunque en el pasado también fue objeto de especulaciones debido a rumores sobre su vida personal.

Legado y futuro

A pesar de los altibajos en su carrera y las críticas a algunas de sus decisiones de proyectos, Meg Ryan sigue siendo una de las actrices más icónicas de su generación. Su talento y capacidad para conectar emocionalmente con su audiencia han sido los pilares de su éxito a lo largo de los años. Las películas de comedia romántica que protagonizó en los años 90 continúan siendo populares y se siguen viendo como clásicos, con su imagen como una de las figuras más entrañables de Hollywood.

Además de su exitosa carrera en el cine, Ryan ha dejado una marca indeleble en la industria del entretenimiento. Ha demostrado ser una actriz capaz de evolucionar, de cambiar y de diversificar su trabajo a lo largo de las décadas. Su legado en la cultura popular es irrefutable, y su influencia sigue viva en muchas de las generaciones que crecieron viendo sus películas en la gran pantalla.

Aunque en años recientes ha mantenido un perfil más bajo, Meg Ryan sigue siendo una de las actrices más queridas de Hollywood, y su carrera continúa siendo un ejemplo de la capacidad de reinventarse y superar los desafíos de la industria cinematográfica.

Filmografía

En esta sección, exploraremos las películas y/o series más destacadas de la trayectoria profesional de Meg Ryan, aquellas que han definido su carrera y consolidado su estatus en el mundo del cine y/o la televisión.

Series

  • Meg Ryan: Icono de la comedia romántica en el cine de los 90

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