Webipedia HD Christopher Plummer fue un actor canadiense cuyo talento y presencia en pantalla lo llevaron a convertirse en una de las figuras más respetadas de Hollywood. Su carrera abarcó más de seis décadas, en las que destacó en cine, teatro y televisión. Plummer es especialmente recordado por su papel en Sonrisas y lágrimas (The Sound of Music), pero su capacidad para interpretar papeles complejos y diversos lo hizo ganar elogios en obras dramáticas y contemporáneas. Su dedicación al arte de la actuación y su éxito a lo largo de los años lo consolidan como un verdadero ícono del cine.
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Biografía de Christopher Plummer
Primeros años y formación
Christopher Plummer nació el 13 de diciembre de 1929 en Toronto, Canadá, en una familia aristocrática. Su madre, Isabella Mary, era una socialité y su padre, John Plummer, un experto en comercio y vicepresidente de una importante empresa. Aunque su familia no estaba directamente involucrada en el mundo de las artes, Plummer mostró un interés temprano en la actuación, una pasión que comenzó a desarrollarse cuando era adolescente.
A lo largo de su juventud, Plummer asistió a la escuela secundaria en su ciudad natal, pero sus estudios se vieron interrumpidos cuando su madre lo inscribió en el conocido “Banff School of Fine Arts” en Alberta, donde profundizó en su amor por la actuación. Después de completar sus estudios en Banff, Plummer se trasladó a Inglaterra para continuar su formación en la prestigiosa Escuela de Arte Dramático de Londres, donde fue formado bajo la tutela de renombrados maestros y perfeccionó su técnica teatral.
En 1950, a los 20 años, Plummer hizo su debut profesional en el teatro, y en poco tiempo se destacó como un joven actor prometedor. Su habilidad para asumir papeles clásicos y contemporáneos lo hizo muy solicitado en el ámbito teatral.
Inicios en el teatro y el cine
La carrera de Christopher Plummer comenzó en el teatro, y fue allí donde realmente pudo demostrar su destreza y amplitud como actor. A fines de la década de 1950 y principios de la de 1960, se presentó en una serie de producciones teatrales tanto en Canadá como en los Estados Unidos, interpretando a personajes de obras clásicas de Shakespeare y otros dramaturgos renacentistas. Su talento le permitió ganar fama en el ámbito teatral, y pronto su nombre se hizo conocido en la comunidad artística.
Su primer gran éxito en el teatro fue en 1956, cuando interpretó al joven Hamlet en una producción de la famosa obra de Shakespeare. A lo largo de los años, su interpretación de Hamlet se mantuvo como una de sus actuaciones más emblemáticas, y sentó las bases para una carrera que abarcó múltiples géneros y estilos teatrales.
En el cine, Plummer debutó en 1958 con el filme Stage Struck, dirigido por Sidney Lumet. Aunque su participación fue pequeña, marcó el inicio de una carrera cinematográfica que lo llevaría a convertirse en una de las estrellas más respetadas del cine mundial. A principios de la década de 1960, Plummer comenzó a recibir roles más sustanciales en Hollywood. Fue en 1965 cuando alcanzó fama internacional gracias a su interpretación de «Captain von Trapp» en la exitosa película musical The Sound of Music (La novicia rebelde), dirigida por Robert Wise.
The Sound of Music y el reconocimiento internacional
The Sound of Music (1965) es una de las películas más icónicas de la historia del cine, y para Christopher Plummer, este fue un papel que definió su carrera. A pesar de que el filme estaba centrado en la figura de Julie Andrews como la novicia Maria, Plummer interpretó al capitán von Trapp, un hombre severo y distante que finalmente se enamora de Maria. Su interpretación de von Trapp fue aclamada por su complejidad y profundidad, contrastando con la imagen más tradicionalmente “dulce” del personaje, y su química con Andrews fue esencial para el éxito de la película. La película se convirtió en un fenómeno mundial, y aunque Plummer fue inicialmente reacio a participar en un musical, su papel en The Sound of Music lo catapultó a la fama y le permitió disfrutar de una exitosa carrera en Hollywood.
A pesar del éxito de The Sound of Music, Plummer era muy consciente de los peligros de ser encasillado en roles similares. En los años siguientes, hizo un esfuerzo consciente por diversificar su carrera, eligiendo papeles en diferentes géneros, desde dramas hasta thrillers. Uno de los ejemplos más notables de este cambio de dirección fue su participación en la película The Man Who Would Be King (1975), dirigida por John Huston. En este filme, Plummer interpretó a un veterano soldado británico que emprende una peligrosa aventura en las tierras exóticas de la India, junto con Sean Connery y Michael Caine.
Diversificación y papeles complejos
A lo largo de las décadas de 1970 y 1980, Christopher Plummer continuó diversificando su carrera y abriéndose camino en el cine de prestigio. Interpretó a personajes más oscuros, complejos y difíciles, demostrando su habilidad para ir más allá de su papel en The Sound of Music. En The Silent Partner (1978), una película de suspense canadiense dirigida por Daryl Duke, Plummer interpretó a un criminal, una interpretación que contrastó con sus papeles anteriores y fue muy apreciada por la crítica.
Durante este tiempo, Plummer también se destacó en roles en el teatro y la televisión. A finales de la década de 1980 y principios de la de 1990, continuó demostrando su versatilidad al aparecer en una variedad de producciones teatrales y filmes de cine independiente. Fue reconocido con varios premios Tony por su trabajo teatral, incluyendo un galardón por su papel en la obra Barrymore en 1997.
Éxito tardío y premios de la Academia
Christopher Plummer vivió una especie de renacimiento en su carrera a partir de los 70 años, cuando comenzó a recibir papeles en películas de alto perfil que lo colocaron nuevamente en el centro de la atención. En 2009, interpretó a Leo Tolstoy en la película The Last Station, por la cual recibió una nominación al Premio de la Academia como Mejor Actor Secundario. Su actuación fue ampliamente aclamada, y muchos consideraron que este fue su regreso definitivo al cine de prestigio.
En 2012, a los 82 años, Plummer finalmente ganó el Oscar a Mejor Actor Secundario por su papel en Beginners, una película en la que interpretó a un hombre de la tercera edad que sale del clóset y comienza una nueva vida con su joven pareja. La victoria de Plummer fue celebrada por la crítica, ya que a pesar de haber tenido una carrera impresionante, este fue su primer Oscar, un premio que muchos consideraban un reconocimiento a toda su trayectoria.
Últimos años y legado
En los últimos años de su vida, Christopher Plummer siguió trabajando incansablemente. Continuó participando en películas de prestigio, como All the Money in the World (2017), donde interpretó a J. Paul Getty, el magnate de los negocios que se vio involucrado en un escándalo relacionado con el secuestro de su nieto. Para este papel, Plummer fue nominado nuevamente a los premios de la Academia.
Christopher Plummer falleció el 5 de febrero de 2021, a los 91 años. Su muerte fue un golpe para la industria del cine, que perdió a uno de sus actores más influyentes. A lo largo de su carrera, Plummer dejó una marca indeleble en el cine y en el teatro, y su legado continúa siendo una fuente de inspiración para actores y cineastas en todo el mundo.
Conclusión
Christopher Plummer fue una figura central en la historia del cine y el teatro, reconocido por su habilidad para interpretar una amplia gama de personajes, su imponente presencia en pantalla y su impresionante voz. Desde su icónico papel en The Sound of Music hasta su éxito tardío en Beginners y All the Money in the World, Plummer dejó una huella que perdura. Su talento excepcional y su dedicación al arte lo convirtieron en un verdadero icono, y su legado sigue vivo en las películas que protagonizó y en los recuerdos de aquellos que lo admiraron.
