«Magic: The Gathering Arena» o «MTG Arena» es un juego digital de cartas coleccionables disponible para dispositivos móviles y PC tanto para principiantes como para veteranos de «Magic», el juego de cartas coleccionables que dio origen a todo, diseñado allá por 1993 por Richard Garfield. Dicho juego, el «Magic» original, es el primer ejemplo de juego de cartas coleccionables moderno, con más de seis millones de jugadores en todo el mundo, y en general, nos referiremos en más de una ocasión a él como «Magic físico», a diferencia del «Magic Arena», objeto de este tutorial, y en el que la plataforma online desarrollada por Wizards of the Coast permite que jugadores ubicados en cualquier parte del globo pongan a prueba sus dotes como magos sin necesidad de estar sentados en la misma mesa.
Mucho más y mejor contenido (tutoriales, partidas, directos, etc.) en nuestro Canal de Youtube dedicado a MTG Arena: MagicForAll.
Tabla de contenidos
MTG Arena
Aclarado esto, y entrando más en detalle de lo que es «MTG Arena», como todos los juegos online de estas características, el «alma del juego» (por decirlo de alguna manera) consiste en ir poco a poco consiguiendo recompensas, a través de las misiones y eventos online (que veremos más adelante en otro artículo dedicado), y con ello ir poco a poco mejorando nuestra colección de cartas y construyendo mazos más competitivos. Las cartas pueden ser de lo más variopintas, dado que cada cierto tiempo (3 o 4 meses) van saliendo colecciones nuevas, en las que los creadores de dichas cartas intentan siempre darles una nueva «vuelta de hoja» y multiplicar sus capacidades en el juego.
Resumiéndolo mucho, en «Magic Arena» hay cartas de criaturas, encantamientos, hechizos instantáneos, artefactos, batallas, etc., cada una de ellas de un color concreto (blanco, azul, negro, rojo o verde), una combinación de ellos, o bien incluso cartas incoloras. No te compliques demasiado de momento con esto de los colores. Simplemente quédate de momento con el concepto de que, para lanzar un hechizo (sea de la naturaleza que sea), es necesario maná, y ese mañana proviene que las cartas llamadas «tierras». Dichas tierras pueden generar maná incoloro, o bien maná de un color concreto. Además, cuantas más tierras tengas en el campo de batalla, serás capaz de lanzar hechizos de un coste más alto (o bien varios hechizos más «pequeños» uno detrás de otro).
Utilización de la Plataforma Online
Al principio, cuando entras por primera vez en la plataforma, y una vez que has realizado una serie de tutoriales para aprender a jugar, el sistema te «regala» una serie de mazos de cartas «gratis». Con ellos, ya puedes jugar partidas sueltas en los formatos de juego disponibles (Estándar, Alquimia, Histórico, Brawl o Intemporal), o bien jugar el modo «Clasificatorio» para intentar ir progresando en los distintos niveles y que al comenzar el siguiente mes el juego te de más o menos recompensas (generalmente sobres de cartas). También puedes apuntarte a eventos de diversas características, aunque los verdaderamente importantes tienen un coste en oro o en gemas.
¿Y qué son el oro y las gemas? Pues a grandes rasgos podemos decir que son las «monedas de cambio» que utiliza el juego para que los jugadores puedan canjearlas por los diferentes artículos disponibles. Cuanto más oro y más gemas tengas, más capacidad tendrás que suscribirte a eventos, comprar sobres de cartas, comprar cosméticos, etc. En el artículo dedicado que destinaremos a lo que se denomina «farmear», veremos en detalle estos dos elementos y daremos algunas recomendaciones para rentabilizar mejor tu experiencia con la plataforma.
Desarrollo de las Partidas
En cuanto a las partidas, generalmente se enfrenta un jugador contra otro, cada uno de una cantidad de vidas (lo más habitual es que sean 20), y el objetivo es conseguir que tu rival llegue a cero (o menos de cero) para así poder ganar la partida. A cada jugador se le dan 7 cartas para iniciar la partida, aunque si no le gustan dichas cartas, puede aplicar lo que se denomina «mulligan» repetidas veces hasta que consiga tener una mano que le satisfaga, aunque el problema de esto es que, cada vez que se realiza un «mulligan», se va sumando «1» al número de cartas que debes descartar antes de iniciar la partida. Es decir, si he hecho «mulligan» 2 veces, tendré que descartas 2 cartas del conjunto de 7 con el que finalmente me he quedado, por lo que empezaría el juego únicamente con 5 cartas.
Con turnos alternativos entre los dos jugadores, un jugador empieza jugando y el otro empieza robando una carta. Por lo general, lo mejor es empezar jugando, para ir siempre un turno por delante, aunque puede haber casos concretos donde puede interesar no jugar primero. En cada turno, el jugador puede poner sobre la mesa una (y solo una) carta de tierra, aunque hay ciertas cartas que pueden «trucar» esto, pudiendo ponerse varias tierras en el mismo turno. Si en tu mano tienes cartas todos los turnos, llegados al turno n habrás podido poner en la mesa n tierras, y conforme los turnos vayan pasando podrás realizar hechizos cada vez más poderosos.
Y no me extenderé más de momento, ya que entiendo, que si no conocías todavía nada del juego, quizás estés ya algo saturado. En próximos artículos profundizaremos en aspectos como las mecánicas de juego, los tipos de cartas, el uso de comodines, etc. ¡No te los pierdas!