Webipedia HD ¡Llega la nueva entrega de la BondManía! Tras los anteriores ciclos protagonizados por Sean Connery y Roger Moore, llega el turno de Timothy Dalton, el cual, aunque no gozó de muchas oportunidades para demostrar hasta dónde podía llegar, sin duda le dio su estilo propio al personaje.
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Timothy Dalton: El Shakesperiano
La productora se mostraba muy reticente a cambiar de actor para interpretar al célebre espía británico y, de hecho, el proyecto inicial para el nuevo largometraje tras «Panorama para matar» contaba de nuevo con Roger Moore a la cabeza.
Sin embargo, Roger anunció su retirada del personaje y, como sabemos, su puesto lo ocupó el galés Timothy Dalton, que por aquel entonces había obtenido un cierto caché en el teatro, interpretando obras de Shakespeare.
Fue muy cortita su andadura como James Bond, pero aún así sus películas (tantas como 2) tienen un lugar especial dentro del universo Bond.
Como curiosidad, comentar que, muchos años antes, en 1968, a Dalton ya se le había ofrecido la posibilidad de interpretar a dicho personaje protagonizando «007 al servicio de su majestad». Sin embargo, rechazó el papel por considerarse demasiado joven (y no le faltaba razón), siendo interpretado finalmente por George Lazenby.
A continuación veremos un análisis detallado de sus 2 películas como agente 007, las cuales fueron estrenadas en los años 1987 y 1989, año en el que, por diversos motivos, el personaje dijo adiós a la gran pantalla durante nada menos que 6 años.
Recomendamos ver las películas antes de leer los comentarios (y no después), ya que aunque no hay demasiados spoilers, sí que puede haber algún detalle que sería mejor no saber si nuestra intención es verlas.
Películas
En esta sección, realizaremos un profundo análisis de todas las películas de James Bond de la «Era Dalton».
A continuación, el listado completo de Timothy Dalton como agente 007, que incluye las siguientes películas de James Bond (pincha en el enlace correspondiente para acceder a cada una de ellas):
Alta tensión (1987): Gran película
Sinopsis
James Bond ha sido designado expresamente por el general «Koskov» (Jeroen Krabbé), un desertor de la KGB, para que lo proteja durante su estancia en Inglaterra.
Reunido con los directivos del MI6, Koskov contará que, su compatriota, el general «Pushkin» (John Rhys-Davies) tiene la intención de asesinar a varios agentes británicos, pero Bond tiene sus sospechas y, pretendiendo ayudar a «Kara Milovy» (Maryam d’Abo), la linda chelista protegida de Koskov, irá hasta el fondo del asunto.
Personajes
Gran plantel de personajes en esta cinta, encabezados por un fantástico cuarteto de malos, con el general «Georgi Koskov» (Jeroen Krabbe), su eficiente brazo ejecutor «Necros» (Andreas Wisniewski), el general «Leonid Pushkin» (John Rhys-Davies) y el traficante de armas «Brad Whitaker» (Joe Don Baker).
Por su parte, del lado de los buenos tenemos a «Kamran Shah» (Art Malik) y al agente «Saunders» (Thomas Wheatley).
«Kara Milovy» (Maryam D’Abo) es la adorable «chica Bond» principal de la cinta, en un papel que, aunque muchos lo consideran algo soso, a mí nunca me pareció que estuviera nada mal.
Le acompañan «Rubavitch» (Virginia Hey), «Linda» (Kell Tyler) y «Rosika Miklos» (Julie T. Wallace), ésta última en un «impactante» papel.
Robert Brown como «M», Caroline Bliss como «Moneypenny», Desmond Llewelyn como «Q», John Terry como «Felix Leiter», Geoffrey Keen como «Sir Frederick Gray» y Walter Gotell como el general «Gogol», completan el listado de personajes principales.
Valoración
Para empezar, he de decir que esta película es (y creo que siempre será) una de mis favoritas.
¿Que por qué? Bueno, digamos que hay muchos detalles que apoyan este sentimiento.
En primer lugar, podemos hablar de la energía, una energía que en el caso de Moore brillaba por su ausencia (muy carismático el hombre, pero en las escenas de acción se notaba en exceso que era un doble).
En el caso de Dalton, todo lo contrario. A su fabulosa interpretación, hemos de añadir la fuerza, garra y entrega en unas estupendas escenas de acción de esas que quitan el hipo (por ejemplo, la de Gibraltar, al principio).
Además, la banda sonora de la película es una auténtica delicia. No me refiero a la canción de la película, sino a la melodía que suena a lo largo de la misma (sencillamente espectacular).
Por su parte, el film cuenta con un nada desdeñable argumento de espionaje (que se echaba de menos).
Contamos con buenas interpretaciones en general de todos los personajes. De hecho, Joe Don Baker repetiría años más tarde junto a Pierce Brosnan.
Poco humor, eso sí, pero lo cierto es que las situaciones tampoco daban para mucho más.
Señalar también que la película nos regla algunas escenas inolvidables, como la del descenso por la nieve sobre la funda del chelo.
También la escena del coche sobre el lago helado (un coche al que, por cierto, no le falta detalle), que para mí de las mejorcitas de la saga.
Por otro lado, impresionante la lucha final entre Dalton y Wisniewski (me recuerda un poco a la protagonizada por Connery y Shaw en «Desde Rusia con amor»).
En resumen, son muchos los alicientes para, a nuestro juicio, colocar a esta película entre las mejores del agente 007.
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Licencia para matar (1989): Demasiado ruda
Sinopsis
Poco después de haber participado en una importante operación contra el narcotráfico, el agente de la CIA Félix Leiter se casa. Sin embargo, el capo detenido en la operación se escapa y asesina a su esposa, dejándolo gravemente herido y torturado.
Su viejo amigo James Bond decide cobrarse venganza. Sin embargo, su jefe «M» le asigna otra misión, llevando al agente 007 a abandonar el servicio secreto británico para embarcarse en una caza personal del villano.
Personajes
«Franz Sanchez» (Robert Davi) nos brinda a uno de los villanos más acojonantes de la saga (de hecho, solo con verle la cara ya piensas que no trama nada bueno).
Le acompañan «Milton Krest» (Anthony Zerbe), «Dario» (un jovencísimo Benicio Del Toro), «Truman-Lodge» (Anthony Starke), «Ed Killifer» (Everett McGill) y «Heller» (Don Stroud), todos a un excelente nivel (si será por malos).
Por su parte, «Pam Bouvier» (Carey Lowell) y «Lupe Lamora» (Talisa Soto) componen el bello dúo de «chicas Bond» de la cinta, deleitándonos incluso con alguna escena de celos de esas que quedan en la retina.
Junto a ellas, tenemos a «Della Churchill» (Priscilla Barnes), la eterna mujer de Felix Leiter.
Robert Brown como «M», Caroline Bliss como «Moneypenny», Desmond Llewelyn como «Q», Frank McRae como «Sharkey», David Hedison como «Felix Leiter» y Wayne Newton como «Joe Butcher», completan el listado de personajes principales.
Valoración
Se trata de una película ciertamente irregular, sobre la que podemos decir que tiene un lamentable comienzo y un espectacular final.
La mutilación de Felix Leiter me parece totalmente innecesaria, ya que se me ocurren muchas alternativas que habrían encajado perfectamente con el desarrollo de la trama (sin tener que recurrir a algo tan desagradable).
En cualquier caso, luego la cosa mejora (y bastante), y deja a la película con una nota definitiva bastante aceptable.
A las ya mencionadas fantásticas interpretaciones de los personajes, hemos de sumarles algunos gags cómicos de altísimo nivel, además de algunas escenas de acción que son de lo mejorcito de la saga (sobre todo la del final, con los camiones cisterna).
Por contra, fue muy criticado el hecho de que tengamos delante al Bond posiblemente más vengativo y despiadado de todos.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que, no en vano, se trata de una cruzada personal por vengar las atrocidades cometidas contra su amigo Leiter (por cierto, curioso que se eligiera al mismo actor que también le encarnó en «Vive y deja morir»).
Por otro lado, también hemos de decir que el nivel de las «chicas Bond» de esta cinta crece exponencialmente con respecto al de la anterior.
Mención especial merece el mayor peso que tiene en este largometraje el personaje de «Q», que pasa literalmente de ser un actor de reparto que aparece apenas 1 o 2 minutos, a ser un personaje secundario que trata de ayudar a Bond en sus menesteres realizando «trabajo de campo».
En definitiva, una pena la rudeza de algunas escenas, porque la película, sin llegar a nuestro juicio al nivel de la anterior, tiene una estupenda manufactura en líneas generales.
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Valoración Global
No tuvo demasiada suerte Timothy Dalton entre el gran público, acostumbrado al estilo «soft» de Moore.
Y es que este Bond más despiadado y vengativo chocaba con el estilo desenfrenado de su predecesor, pero también hay que decir que, de hecho, ese era uno de los objetivos de la productora, es decir, un Bond más parecido al que Ian Fleming describía en sus novelas (agresivo, frío y violento).
Y Dalton lo hizo a las mil maravillas, dotando también a los largometrajes de una energía de la que ya carecía el, por aquel entonces, casi sexagenario Roger Moore.
Fue una pena que las batallas legales entre las productoras retrasaran el rodaje de la siguiente película (lo que dio lugar a que, años más tarde, Dalton se negara a volver al personaje), ya que siempre quedará la duda de cómo habría sido una tercera entrega con Dalton al frente.
En resumen, Timothy Dalton protagonizó dos buenas películas (mejor la primera que la segunda), con un Bond muchísimo más creíble (además de excelentemente interpretado), y unos malos y «chicas Bond» que mantienen con creces dicho nivel de credibilidad.
